Recientemente, el reconocido cantante ha negado rumores sobre su salida de México, pero su residencia en Estados Unidos plantea interrogantes.

Pepe Aguilar, destacado ícono de la música mexicana, ha sido centro de controversias tras negar en un video en sus redes sociales que él y su familia planeen abandonar México. Sin embargo, esta declaración ha generado críticas, ya que desde hace años residen en una lujosa mansión en Texas, Estados Unidos. Este hecho ha llevado a cuestionar la autenticidad de su conexión con sus raíces mexicanas.

En el mencionado video, Pepe Aguilar desmintió los rumores de mudanza, aclarando que solo se trataba de unas vacaciones en Madrid. Con tono relajado, intentó minimizar los rumores, pero omitió mencionar que su residencia principal es una propiedad de casi 10 acres en Texas, donde ha invertido significativamente. La mansión, de tres pisos, cuenta con piscina, jacuzzi, establos y amplias áreas verdes, y ha sido su hogar por un tiempo considerable. Además, esta propiedad sirve como base para sus giras en Estados Unidos, donde su agenda parece más activa que en su país natal.

Su hija, Ángela Aguilar, también disfruta de este estilo de vida. Se ha informado que su residencia en Magnolia, Texas, le ha brindado un refugio tras múltiples ataques en redes sociales, especialmente después de su breve matrimonio con el cantante Christian Nodal. Aunque algunos informes indican que Ángela vive con Nodal, otros sugieren que prefiere la privacidad y el lujo de su mansión mientras mantiene cercanía con su nuevo amor.

A pesar de las críticas hacia su hija, Pepe insiste en que continuará ofreciendo conciertos en México, en ciudades como Querétaro, Guadalajara y Zacatecas, fundamentales para su carrera. Sin embargo, gran parte de sus ingresos por estas presentaciones provienen de un país que, según sus propias palabras, no piensa abandonar. Esta contradicción entre su discurso y su estilo de vida ha desconcertado a muchos de sus seguidores.

Además, la polémica ha aumentado debido a que tanto Pepe como Ángela Aguilar poseen la nacionalidad estadounidense. Esto ha llevado a cuestionar su autenticidad como representantes del regional mexicano, ya que, aunque disfrutan del mercado y éxito musical en México, su vida se desarrolla en una comunidad lejana, en Texas. En su video, Pepe también promocionó sus próximos conciertos con caballos y mariachi, intentando reafirmar su conexión con las tradiciones mexicanas. Sin embargo, su vida alejada de las críticas y del caos mexicano hace que muchos lo perciban desconectado del público que lo ha seguido durante años.

La figura de Pepe Aguilar parece haber evolucionado de un cantante que representaba a México a alguien que ha adoptado el extranjero como su hogar. Su estilo de vida en Texas, lejos de las tensiones y controversias de su país natal, sugiere que su relación con México es más una cuestión de mercado que de identidad. Aunque sus éxitos lo consolidaron como una figura del regional mexicano, su postura actual hace pensar que prefiere los beneficios de la fama sin los inconvenientes que conlleva la vida en México.

Es probable que Pepe Aguilar deba reflexionar sobre su postura y ser más honesto acerca de sus prioridades. Si realmente desea seguir siendo un representante genuino de la música mexicana, tendrá que enfrentar las críticas y aclarar de una vez por todas qué significa para él ser un “nacionalista” cuando su residencia está al norte del Río Bravo.